domingo, 26 de abril de 2009

I Encuentro ADHT

Este fin de semana he estado haciendo este precioso acerico. No ha sido tarea fácil, aquí donde lo véis ha requerido muchas horas de duro trabajo, grandes consejos y siempre conversación.

Primero, decidir el diseño, Mitas hizo todo el trabajo previo, lo ideó y hizo un kit completito para cada una.

Después la elección de las telas: Chus que me ha cambiado el estilo, Bea, que no podía decidirse entre sus múltiples posesiones y tuvo que hacer dos, Julia la más rompedora, Pepa en tonos rojos y Chelo en calderos y ambos muy elegantes.

A continuación el embellicimiento, siguiendo los consejos de Beatriz que puso a nuestra disposición todo su arte torero, Carmela con estilo vintage y lo peor de todo, cintas francesitas a go gó.

Y rematar lo que se dice rematar, Isabel la única, que es una campeona, Mª Rosa que es una hormiguita trabajando, y Maruja que se animó pese a todo pronóstico.

En fin, un lujo, esto sí que es un trabajo colectivo. Me he traido a mi casita, un crazy de colores, estilos, abalorios, caracteres y diferentes sensibilidades, con un punto en común, el ánimo de compartir aficción y .... las amapolas.

Todo esto aderezado con la alegría de Sara y Gaby, y la dulzura de las frutas de Aragón, los dulces de Sabiñánigo y mis cookies.

¿Cuándo es el próximo?

Pongo unas fotos del intercambio de tesoros que hicimos:

mi aportación.....

y la de Mitas, que aunque no lo sabía, estaba pensando en mí, y en mi aficción por los cachibaches....

martes, 21 de abril de 2009

Siguiente paso de mi colcha

He avanzado un poco más en mi colcha, y he tenido que coser entre sí triángulos rectángulos. He utilizado una técnica bastante rápida que enseñaba Ana en su blog. Se trata de cortar los cuadrados después de haber cosido. Así lo he hecho todo en serie:
Aprovecho para enseñaros mi supermáquina, una Alfa de los años 70, que me ha dejado mi madre. Es manual y aunque me ha costado cogerle el truco, ahora confío en no librarme de ella en mucho tiempo, si es que consigo utilizarla para acolchar a máquina. Ya estoy haciendo alguna prueba y hay posibilidades.


lunes, 13 de abril de 2009

Mi bolsa

Hace un par de domingos me entretuve haciendo mi propia bolsa plastificada.

Estaba harta de ver en el metro estas bolsas de tela plastificada (tipo Harrods) y elegí una de mis telas preferidas, una de diseño un poco psicodélico de Kaffe Fasset, y me puse a la tarea de conseguir un plástico que fuera el adecuado para forrar una tela. Preguntando a mis compañeras del grupo ADHT, acabe comprando uno denominado Visiofix, que se aplica con calor a la tela.

Este ha sido el resultado. Estoy bastante satisfecha, aunque el plástico no es el idóneo porque cuando se arruga se despega un poco y hay que volver a plancharlo. Seguro que alguna de vosotras ha trabajado con material para plastificar telas, ¿queréis compartirlo conmigo?

jueves, 2 de abril de 2009

Telas flechazo

Dícese de ese amor instantáneo que surge entre toda aficionada al patchwork y cualquier trozo de tela que se no se sabe por qué razón destaca entre un montón de telas apiladas en una estantería de cualquier tienda. A diferencia de otros flechazos, este amor es fiel, te llevas las telas a tu casita, y de allí ni se mueven, sólo cuando tú decides si tendrán finalmente un uso, o si las dejas que se muestren en tu propia estantería.
Pues yo tengo muchas de estas, y un par de ellas vivían en mi casa desde el verano pasado, "se me lanzaron al cuello" en la tienda de Rosario Casanovas durante las vacaciones y evidentemente no me pude resistir.
Hace poco descubrí cuál podría ser su uso. Necesitaba un bolso y me apetecía coserlo con estas manitas. Así que compré un cinta de terciopelo que combinara y esto es lo que ha salido.

La idea del bolso, la tomé del libro de Yoko Saito que mostré en una entrada anterior, simplificando un modelo bastante más laborioso. Esta ha sido muy sencillito, lleva entretela en la base para que tenga un poco de cuerpo, y después lleva acolchado a mano cada tela en un motivo diferente:En su interior, hice un pequeño bolsillo para meter las llaves, que ya sabemos que luego no hay quien las encuentre. Y como cierre utilicé un imán facílisimo de poner.

Mira que me gustan los bolsos de Adolfo Domínguez, y ya tengo unos cuantos, pero a partir de ahora, Adolfo, no te vas a hacer rico conmigo. ¡Esto crea adicción!

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...