Este fin de semana he estado haciendo este precioso acerico. No ha sido tarea fácil, aquí donde lo véis ha requerido muchas horas de duro trabajo, grandes consejos y siempre conversación.
Primero, decidir el diseño, Mitas hizo todo el trabajo previo, lo ideó y hizo un kit completito para cada una.
Después la elección de las telas: Chus que me ha cambiado el estilo, Bea, que no podía decidirse entre sus múltiples posesiones y tuvo que hacer dos, Julia la más rompedora, Pepa en tonos rojos y Chelo en calderos y ambos muy elegantes.
A continuación el embellicimiento, siguiendo los consejos de Beatriz que puso a nuestra disposición todo su arte torero, Carmela con estilo vintage y lo peor de todo, cintas francesitas a go gó.
Y rematar lo que se dice rematar, Isabel la única, que es una campeona, Mª Rosa que es una hormiguita trabajando, y Maruja que se animó pese a todo pronóstico.
En fin, un lujo, esto sí que es un trabajo colectivo. Me he traido a mi casita, un crazy de colores, estilos, abalorios, caracteres y diferentes sensibilidades, con un punto en común, el ánimo de compartir aficción y .... las amapolas.
Todo esto aderezado con la alegría de Sara y Gaby, y la dulzura de las frutas de Aragón, los dulces de Sabiñánigo y mis cookies.
¿Cuándo es el próximo?
Pongo unas fotos del intercambio de tesoros que hicimos:
mi aportación.....
y la de Mitas, que aunque no lo sabía, estaba pensando en mí, y en mi aficción por los cachibaches....